Roscón de reyes

Ya están aquí las navidades. Una época estupenda para los que nos gusta comer y también para los que nos gusta cocinar. Este año para que tengáis tiempo de sobra, me adelanto y os pongo la receta del roscón de reyes. 

Llevo unos tres años haciéndolo y aunque es bastante laborioso, merece la pena. Normalmente hago dos al mismo tiempo y he de decir que el día 7 de enero ya no quedan ni las migas. Os animo a que lo intentéis.

La receta la saque de un foro hace mucho tiempo por lo que no recuerdo al autor de la misma, si alguien lo sabe que me lo diga para que le cite en el post.

Tiempo de preparación (4 horas): 

Ingredientes:

• 500 gramos de harina de fuerza
• 40 gramos de levadura fresca
• 100 gramos de azúcar
• 150 ml leche
• 120 gramos de mantequilla
• 1 huevo (para pintarlo)
• 1/3 vaso de agua de azahar
• 10 gramos de sal
• Ralladura de naranja y limón

Preparación:

Para que el roscón tenga mejor sabor lo primero que haremos será preparar una masa madre. Para ello, disolvemos la levadura en 100 ml de leche templada, (no la calentéis mucho por que os cargáis a nuestras amigas las bacterias), y lo mezclamos con 125 gramos de harina. Hacemos una bola y lo metemos en un cuenco tapado con un paño húmedo durante 90 minutos. Para que la masa fermente correctamente deberemos dejarlo en un lugar cálido. 

Pasados los 90 minutos mezclamos la mantequilla, la sal, el azúcar, el agua de azahar y las ralladuras de naranja y limón. Vamos incorporando la harina y lo mezclamos todo bien. Juntamos la masa madre con la mezcla anterior y amasamos hasta tener una masa fina y elástica que no se pegue a las manos. Si vemos que está demasiado seca podremos añadir leche muy poco a poco. En mi caso añadí aproximadamente 30 ml más. Hacemos de nuevo una bola y la embadurnamos de aceite. La dejamos reposando unos 20 minutos (Tapada con un trapo húmedo).

Cogemos la masa y con las manos le hacemos un hueco en el centro. Ya en la bandeja del horno vamos dándole forma. Se debe empujar la masa de dentro del hueco hacia fuera, estirándola hasta que tenga el tamaño que deseemos. La metemos en el horno a 40 grados hasta que triplique su volumen. Más o menos unas 2 horas. Cuando estiréis la masa tened en cuenta este aumento de volumen para que nos quede con la forma adecuada.

Pintamos el roscón con huevo batido y lo volvemos a meter en el horno a 180 grados, entre 12 y 15 minutos o hasta que esté totalmente dorado. Al menos en los 10 primeros minutos no abráis el horno, la entrada de aire frío puede hacer que baje.

Una vez cocido podremos decorarlo según nuestros gustos. A mi me gusta simplemente con almendras tostadas y azúcar glaseado.

Respecto a la sorpresa, como yo lo suelo rellenar de nata la suelo poner cuando lo relleno. En caso de que no se vaya a rellenar se deberá poner cuando se está estirando la masa para darle la forma de roscón (ojo que el regalo aguante las temperaturas del horno).

¡Feliz Navidad a todos!